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| Los SinPedrolos en el Pico de la Miel |
Después de tres meses, si al final eran tres y no dos como yo pensaba, volví a salir con la bici. La de montaña no la había vuelto a tocar desde el Soplao, y la de carretera tampoco demasiado, creo que un par de sesiones de rodillo y poco más. Así que le tenía unas ganas terribles a eso de madrugar el domingo y pedalear monte arriba, monte abajo.
La ruta se publicó el jueves por JuanCar en diversos medios, (facebook, foromtb, foro sinpe...) y nada más ver el track, la descripción y la zona, para mi desconocida por completo pensé que era el día ideal para volver a quedar con los colegas. Además tenía que recoger la ropa de los SinPe que ya hacía tiempo que llevaban rodando con ella y yo aún no había tenido ocasión de disfrutarla.
El punto de quedada era Redueña en la salida 50 de la carretera de Burgos, según mi GPS tardaría unos 35 minutos en llegar, creo que el GPS piensa que voy por la conduciendo a una velocidad media de 180km/h porque al final tardé 55 minutos. Bajar la bici, saludos, y primera alegría del día. Viene Marek con la ropa de los SinPe, así que no queda otra que estrenarla (sólo el maillot porque no me voy a poner con el culo al aire a estas horas de la mañana y en público).
Comenzamos la ruta una buena panda, seis de ellos vamos uniformados y parecemos la vuelta ciclista. Tras un pequeño tramos por carretera en el que alcanzamos los 60km/h, máxima de la jornada, comienza lo bueno y primera "avería" mecánica del día, se me cae la cadena hacia dentro del eje pedalier cuando cambio a plato pequeño, así que nada de plato pequeño, mediano y a reventar, como si tuviese una de esas superbicis modernas de sólo dos platos y 20 velocidades. pero yo con 18 jejeje. Hoy peto fijo...
El campo está un poco seco en general, pero esta zona en primavera y otoño tiene que ser preciosa y muy agradecida, porque ha llovió un pelín la noche anterior y las pistas están perfectas.
La ruta en general me ha recordado a la de los pueblos de la Sierra, porque pasas por varios pueblitos también, y el terreno me ha gustado muchísimo, no hay tramos excesivamente duros, y la ruta se hace muy amena. Una de las cosas que me parece más acertado de este track, es que empiezas y terminas bajando, cosa que siempre deja muy buen sabor de boca. Además une un poco de todo, senderitos, pista, pequeñas trialeras...
En resumen una gran ruta para retomar el ritmo a la gorda y para reencontrarme con los amigos.
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